2/9/98.Los más de 18.000 millones de pesetas de presupuesto que presenta el Real Madrid para la temporada en curso no ocultan el verdadero cáncer que padece el club blanco: una deuda cercana a los 32.000 millones (31.762.072.000 concretamente) que se agrava cuando se comprueba que 19.208 son a corto plazo, es decir a devolver en un año, y 12.553 a medio y largo plazo. A pesar de los casi 900 millones de beneficio con que cerró la pasada temporada, la situación económica que atraviesa el Real Madrid sigue agravándose día a día y el vicepresidente económico del club, Juan Onieva, hace verdaderos malabarismos para sacar la nave adelante y no caer en quiebra técnica. Según publicó ayer el diario Marca, la memoria que ha entregado el club a sus compromisarios está maquillada con el descuento de 8.947 millones de pesetas de esta deuda al contabilizarlos como 'Ajustes por periodificación', si bien en realidad estos prácticamente 9.000 millones no son más que anticipos ya ingresados por el club madridista procedentes de sus contratos televisivos y de Adidas (quien le ha adelantado ya 4.000 millones). Sea como fuere, el agujero se presenta cada vez más profundo. En un año, de hecho, la deuda casi se ha duplicado y sólo la recompra del contrato de Gestsport induce al club a mantener algo la calma de cara al futuro ya que el equipo económico del club estima que en ocho años pueden llegar a nivelarse las cuentas del Real Madrid. Y es que el sueño del vicepresidente blanco es nivelar las cuentas de resultados al finalizar la temporada 2005-2006. Claro que, por otra parte, un completo informe publicado por la revista Actualidad Económica en su edición de esta semana, en el que se hace una comparación entre Real Madrid y Barça desde el punto de vista financiero, deja al descubierto que este futuro es poco menos que crítico en el club blanco, cuyos fondos propios no llegan a los 3.000 millones de pesetas frente a la monumental deuda que le ahoga día a día. Pascual Oliva, auditor de la prestigiosa empresa Ernst & Young, estima en este reportaje que la situación financiera del Real Madrid es "preocupante" y, tras afirmar que ni la venta del Bernabéu y de la totalidad de las estrellas de la plantilla solucionaría sus problemas económicos, critica los balances efectuados por Lorenzo Sanz ya que "está jugando con una contabilidad ficticia al interpretar como un ingreso en caja un contrato de ocho años en vez de periodificarlo en el tiempo que está fijado". En el mismo reportaje, un ex vicepresidente económico del Madrid, que mantiene el anonimato, va más lejos y afirma que el club "está en quiebra técnica". Fin de los adelantos A pesar del optimismo moderado del que hace gala Juan Onieva para afrontar el futuro, la presente temporada se presenta poco menos que crucial para salir a flote. De hecho, en el club nadie oculta su preocupación, puesto que los adelantos procedentes de diversos contratos han tocado a su fin. Adidas ha cerrado ya el grifo y no tiene intención de seguir anticipando dinero y los contratos televisivos han dado ya todo el jugo que podían. Pero ni el férreo control del gasto aplicado por Sanz evita que la situación se acerque al caos. Y, de momento, no parece que el futuro sea mejor.