El 6-0 de Valencia deja al Madrid en una situación desesperada porque el problema va más allá de una humillación deportiva más o menos dolorosa. Su problema es que no tiene equipo. Y lo que es peor, no tiene dinero para hacer uno nuevo. Todo lo contrario del Barça, que tiene un equipo campeón y una situación económica saneada. El club blanco está a años luz del azulgrana en todos los sentidos. Para empezar, en el Barça se hacen las cosas con seny y en el Madrid son los reyes de la improvisación. Mientras en el Camp Nou se ha dado confianza a Van Gaal y se han invertido 20.000 millones en hacerle un equipo competitivo, por el Bernabéu han pasado cuatro entrenadores, Heynckes, Camacho, Hiddink y Toshack y así es imposible enfocar cualquier proyecto serio. Mientras el Barça ficha jugadores hechos y con experiencia, el Madrid se trae en diciembre a Ognjenovic, que acaba de debutar, y ahora a Geremi y Congo, dos perfectos desconocidos.Mientrasel Barça se refuerza con Frank de Boer y Figo y Rivaldo están como nunca, el Madrid no encuentra recambio para Hierro o Sanchís, que se le ha hecho viejo, Mijatovic vive de rentas y Savio no es más que una mala copia de Rivaldo. Más que fichar, el Madrid lo que está haciendo es tirar el dinero, va directo al precipicio. Dos Titulos que pagarán, caros.- El drama blanco arranca desde el mismo momento en que ganó la séptima Copa de Europa, un título que posiblemente no merecía y que seguro lo cambiarian por la Liga, simplemente por estar por encima del Barça. El éxito endiosó a los jugadores y cegó a los directivos. Sólo faltó la Intercontinental para que todos creyeran que se hallaban ante el mejor equipo de la historia del fútbol. Los dos títulos fueron un espejismo que actuó de tapadera a los problemas. El equipo se quemaba en la hoguera de vanidades en que se convirtió el vestuario pero nadie quería darse cuenta. Cuando Sanz quiso actuar, ya era tarde. Los dos títulos le van a salir carísimos. La duda de Toshack.- Cuando un equipo como el Madrid es capaz de hacer el ridículo por dos veces, primero con la contratación de Camacho, que ni siquiera se sentó en el banquillo, y después trayendo a Capello en plena temporada para que les diera calabazas, la solución Toshack no es más que un parche que quizás no sirva ni para salvar la temporada. Si el galés falla en los dos próximos partidos, estará muerto y Sanz tendrá que empezar de nuevo por enésima vez, eso en caso de que encuentre otro entrenador porque a este paso no habra un entrenador adecuado, y si lo hay se lo pensara muy bien para venir a este equipo. Esto es un caos. Se duda del entrenador, no hay equipo, y la deuda no se sabe si es de 35.000 o de 40.000 millones.