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El Barça se marcha de Glasgow con sabor agridulce. Los de Rijkaard fueron muy superiores al Rangers pero sólo consiguieron arrancar un empate (0-0) ante un rival que solo se defendió. Las 50.000 almas que abarrotaron Ibrox Park, celebraron el pitido final del colegiado como si de una victoria en una final se tratase. No es para menos, su equipo ha conseguido nada menos que 7 puntos de nueve posibles en 3 partidos, algo impensable para ellos al inicio de la Liguilla.
El Barça salió prudente en la primera mitad. Con Gudjhonsen en lugar del lesionado Deco y Thuram en el de Oleguer, Rijkaard optó por un once de contención a la espera de ver como se desenvolvían Ronaldinho, Messi y Henry en ataque. Pero casi no hubo. Los blaugrana, hoy de naranja, se quedaron sin ideas en cuanto intentaban pisar territorio de McGregor. El meta escocés tenía montada una telaraña impenetrable de 9 hombres delante de él imposible de penetrar.
Ante tanto defensa, la mejor ocasión, como no podía ser de otra manera, vino a balón parado. Ronaldinho ejecutó una falta desde la derecha de la portería escocesa, McGregor desvió con la punta de los dedos y la madera hizo el resto para que el balón no entrara. Esa fue la mejor y casi la única. Sólo Puyol puso en aprietos al portero escocés con un cabezazo que no entró por poco.
En la segunda mitad, el mismo guión. Un equipo atacaba y otro defendía. Solo que esta vez sin ocasiones claras. Ni siquiera a balón parado a pesar de la decena d córnes de qu dispusieron los culés. A los escoceses les quemaba el balón en los pies y lo regalaban a un Barça que se empeñaba en triangular por el centro del área en busca de la filigrana. Nada que hacer.
El Rangers dió un susto mediada la segunda mitad. Ferguson, sin marcaje en el área pequeña, no llegó a un centro de Cousin. Entonces el partido empiezó a tener ida y vuelta, perdiendo los azulgrana el control del que habían gozado durante toda la noche. pero poco duró el lance. Ronaldinho pudo deshacer el equilibrio en el marcador pero su remate, a la salida de un córner, lo desvió un defensa con la mano. El colegiado no vió el penalti. Entonces los locales se fueron encerrando atrás regalando el balón a los catalanes que, desanimados por la falta de ideas, fueron perdiendo empuje y velocidad. Rijkaard intento enmendarlo dando entrada a Giovani por Henry en el tramo final, pero nada cambió.
Al final reparto de puntos, liderato compartido y el Lyón que se acerca, al ganar sus primeros tres en la cancha del Stuttgart (0-2), colista sin puntos.
Glasgow Rangers: Mc Gregor; Hutton, Carlos Cuéllar, Weir, Papac; Novo (Beasley, 72'), Adam, Ferguson, Thomson, McCulloch; Cousin.
FC Barcelona: Victor Valdés, Puyol, Thuram, Gabi Milito, Abidal, Xavi, Iniesta, Gudjohnsen, Messi, Ronaldinho y Henry (Giovani, min.81).
Árbitro: Konrad Plautz (Austria). Amonestó a los locales Thomsom (min.35), Papac (min.49) y Weir (min.71), y a los visitantes Milito (min.47) y Abidal (min.62).
Incidencias: Partido correspondiente a la tercera jornada de la Liga de Campeones del Grupo E disputado en Ibrox Stadium ante 50.000 espectadores |